jueves, 29 de abril de 2010

odio

I

-¿sabés qué odio?
-qué.
-odio a la gente que, cuando llueve,

va con el paraguas a la altura de su vista
y no se preocupa si le raja la cara al que
viene caminando en dirección contraria.
y encima, se pone a caminar pegada
a la pared, ocupándose el espacio
que cubren balcones y toldos, espacio
que las personas que no usamos paraguas
tenemos más derecho a usar. ¿no te parece?
y odio a esa gente que limpia su bolso
de papelitos y los tira en el cordón
de la vereda, porque total después
pasa el barrendero.
ah, y también odio a la gente que
da cátedra sobre cosas que apenas
conoce, sólo porque son los temas
de moda en la televisión.
y también a la gente que no se anima
a decir lo que le gusta entonces dice
lo que cree que a vos te va a gustar.
odio a esa gente. como esas mujeres
que en una conversación sobre cine
dicen que a ellas las comedias románticas
les parecen una estupidez.
¿sabés de qué hablo, no?
cuando en realidad, les encantan.
odio eso.
odio no poder evitar pensar
en estas cosas, me enloquecen, te juro.
es que uno se da cuenta de que
el mundo anda mal por eso,
por pequeñas acciones.
odio que eso pase y no poder hacer nada,
te juro, lo odio.


II

-¿te puedo dar un consejo?
-bueno.


III

-no odies.

4 comentarios:

  1. no, no odies.

    detestá, consume menos tiempo.

    ResponderEliminar
  2. El odio es al opio lo que el ojo al piojo.

    ResponderEliminar
  3. Dígale de mi parte que también le aconsejo que no se queje tanto, que "el tiempo envejece deprisa" ( Me tomé el atrevimiento de robar esta última línea de un libro de Antonio Tabucchi)

    ResponderEliminar
  4. No odies y no imites a los que odiarias..
    Buen blog. A, por la entrada anterior, acepto que si las tetas son grandes y descubiertas, me tiento y miro..
    Saludo

    ResponderEliminar